Son pocas las ocasiones que tenemos para llegar al ciudadano en un intento por dar a conocer la fisioterapia y la osteopatía. Aunque, la sociedad es cada vez más consciente de lo amplio que es el mundo de la fisioterapia, la osteopatia cada vez es más conocida y solicitada, siendo realmente una gran desconocida. Actualmente son muchos los fisioterapeutas que utilizan las herramientas de osteopatia en sus intervenciones, complementando y enriqueciendo la fisioterapia, pero muchas personas ignoran si existen diferencias entre fisioterapia y osteopatia, o si son la misma disciplina, por eso, y para su mayor entendimiento, vamos a intentar resolver estas dudas y a diferenciar una de la otra.
FISIOTERAPIA
La fisioterapia es una carrera Universitaria de 4 años actualmente, la cual adquiere el título Oficial de Grado en Fisioterapia.
Fisioterapia por la OMS 1968, es el Arte y la Ciencia del tratamiento físico por medio del ejercicio terapéutico, calor, frío, luz, agua, masaje y electricidad. Además, la fisioterapia incluye la ejecución de pruebas eléctricas y manuales para determinar el valor de la afectación de la inervación y fuerza muscular; pruebas para determinar las capacidades funcionales, la amplitud del movimiento articular y medidas de la capacidad vital, así como ayudas diagnósticas para el control de la evolución. Entre los fines del tratamiento están: el alivio del dolor, el aumento de la circulación, prevención y corrección de la disfunción, así como la máxima recuperación de la fuerza, movilidad y coordinación.
La Confederación Mundial de Fisioterapia da la siguiente definición: La Fisioterapia es el conjunto de métodos, actuaciones y técnicas que, mediante la aplicación de medios físicos, curan, previenen, recuperan y adaptan a personas afectadas de disfunciones somáticas y orgánicas o a las que se desea mantener en un nivel adecuado de salud.
Ahora bien, como sabemos la fisioterapia incluye un gran abanico de posibilidades de tratamiento. Incidimos sobre todo en:
- Problemas musculares y articulares: Que quizás son los más conocidos y con los que más se acude al fisioterapeuta que engloban las famosas sobrecargas musculares, tendinitis , esguinces, ciáticas, hernias discales, trocanteritis, roturas fibrilares, dolores de espalda, etc.
- Dolores de cabeza y mandíbula: Que suelen ser producidos por una tensión acumulada en la zona cervical y que a veces derivan con hormigueos en manos y brazos. La ATM (articulación temporomandibular), juega un papel muy importante en este tipo de pacientes, sobre todo aquellos que sufren bruxismo
- Problemas neurológicos: Los ictus, la parálisis cerebral u otros accidentes cerebrovasculares afectan tanto a los adultos como a los bebés. Aquí, los fisioterapeutas ayudamos al paciente a mejorar su calidad de vida, haciéndole más independiente.
- Problemas linfáticos: Pacientes con un edema importante tras un accidente, una intervención quirúrgica cirugía de cualquier tipo o incluso una cirugía estética.
- Problemas Post-quirúrgicos: de lesiones que han sido intervenidas en quirófanos.
- Y muchos otros más…( uroginecológico, respiratorio, pediátrico, geriátrico… )
OSTEOPATÍA
La osteopatía, no se trata de una profesión para-médica, ni de una medicina alternativa; se trata de una disciplina terapéutica y de un conjunto de conocimientos específicos basados en la anatomía y fisiología del cuerpo humano.
Aunque a la Osteopatía se la relacione fundamentalmente con problemas que afectan al aparato locomotor, lo cierto es que «trata al ser humano de forma global, como un todo, restableciendo el equilibrio perturbado mediante técnicas de tratamiento manuales dirigidas a cualquiera de los tejidos afectados, sean estos del sistema musculo-esquelético, visceral, nervioso, etc.»
Las denominadas “medicinas manuales”, como la osteopatía surgió a finales del siglo XIX en EEUU. Concretamente la American School of Osteopathy fue fundada en 1892, por la que se crea el título de D.O (Doctor en Osteopatía).
En 1962, En EEUU se decretó la equivalencia entre D.O y M.D (Doctor en Medicina). En Canadá, Japón, Australia, Inglaterra y en los países de influencia anglosajona, la Osteopatía coexiste oficialmente con otras profesiones de la salud, médicos, fisioterapeutas, quiroprácticos etc.
En la Europa continental, diversos países como Francia, Bélgica, Noruega, Suiza, Alemania y España han dado a esta disciplina la consideración de estudio formativo independiente, con una duración de 6 años, complementario para médicos y fisioterapeutas.
La formación completa en osteopatía según estándares Europeos es: equivalente a 175 créditos ECTS (4375 horas):
- 1º y 2º año: Master en técnicas Osteopáticas del aparato locomotor (60 créditos/1500h): Programa estructural
- 3º,4º y 5º año: C.O. en Osteopatia – Marco Europeo (90 créditos/2250h): Programa estructural, visceral y craneal
- 6º año: D.O. en Osteopatia – Marco Europeo (25 créditos/625h): Programa de pediatría, oftalmología y sistema arterial.
En España, durante los últimos veinte años, la Osteopatía ha tenido un gran desarrollo gracias a Escuelas de alto nivel académico (como la Escuela de Osteopatía de Madrid, con Sedes en todo el País) reconocidas internacionalmente.
La técnica cada vez más depurada de la Osteopatía, al incidir sobre el conjunto de los tejidos mencionados, ha propiciado su clasificación en varios grandes grupos, según sobre qué tejidos actúe:
- OSTEOPATIA ESTRUCTURAL
Dirigida al sistema musculo-esquelético (cervicalgias, neuralgias, tortícolis, dorsalgias, lumbalgias, ciáticas y, en general, neuralgias de origen vertebral o síndromes compresivos periféricos), o a nivel del tronco, región costal, así como dolores en los miembros superiores o inferiores (secuelas de traumatismos, esguinces, lesiones tendinosas, etc).
- OSTEOPATIA VISCERAL
Orientada a actuar sobre los tejidos que participan en las funciones de las vísceras .Tanto en trastornos digestivos (gastritis, hernia de hiato, molestias intestinales, estreñimiento, alteraciones hepáticas y renales) como ginecologicos y respiratorios
- OSTEOPATIA CRANEAL Y TERAPIA CRANEOSACRA
Actuando también mediante técnicas manuales, liberan y facilitan la micromovilidad del cráneo. Algunas consecuencias de alteraciones posturales, traumatismos, desequilibrios musculares etc, pueden afectar a nervios craneales, arterias, glándulas y otros tejidos, lo que puede provocar neuralgias, dificultades de visión, audición, alteraciones de algunas funciones glandulares, vértigos, migrañas, e incluso trastornos digestivos, respiratorios, vasculares etc.
Dicho esto, de la misma manera que los fisioterapeutas, el osteópata, trabaja con las manos y algunas técnicas pueden confundirse durante una sesión (otras son propias de la medicina Osteopática). Sin embargo, lo que realmente diferencia la osteopatía de la fisioterapia es el enfoque global en el tratamiento y en la capacidad de diagnóstico.
Por ejemplo:
¿Tiene relación nuestro estómago con el dolor de espalda?; ¿me puede doler un hombro por haberme intervenido de una operación de vesícula en el pasado?; ¿hay relación entre nuestra manera de pisar y mi dolor de cabeza?…todas estas preguntas se responden afirmativamente y es ahí donde podemos decir que la Osteopatía hace su aparición.